Laúltimasemana24
Libritos. Un sueño. Diario semanal total. McKinley Dixon, Barbara Tucker, Cage the elephant, Depeche, Sharon Van Etten, The sorcerers, un puñao de tikitokis y Mark Strand.
¡Hola, hola! K’aces? ¡Yo intento recuperar la periodicidad!
Esta semana ha hecho menos calor en Madrid. Odio el puto calor y mi casa llega a los 33 grados si me descuido, a veces incluso está más caliente que la calle. Me cuesta conciliar el sueño y solo lo consigo si coloco dos ventiladores enormes junto a mi cama, que hacen el mismo sonido que imagino que hace el motor de un avión transatlántico. El aire acondicionado solo está en el salón y no puedo tenerlo puesto todo el día por dinero y porque me pongo mala y voy a la agencia al día siguiente con la voz de un fumador de tres paquetes de tabaco. Odio Madrid en esta época, me achicharro.
El lunes ensayamos, puede que haya salido otra canción, la hemos llamado “to pieces from pieces” y rebautizado como “tu pis es mi pis”. Ya se me ha olvidado la melodía de voz, pero como la tenemos grabada en mi patatomóvil, no se perderá del todo. Dice F. que le recuerda a Sharon Van Etten. Ojalá.
El martes leí un montón. Me han regalado todos estos libros por mi cumpleaños:
He empezado por el de Soy Fan, que me está flipando y llevo ya por la mitad en apenas dos o tres sesiones. La lectura se hace sola con esta tía. Me siento muy apegada a algunas de las cosas que dice. Habla de la relación terrible que la prota tiene con un tipo deleznable y de la obsesión que ella misma desarrolla con una chica influencer que sabe que se ha acostado o acuesta con él. Y su lectura me ha llevado a recordar una relación (por llamarlo de alguna manera) toxiquísima que tuve con un tipo hace ya más de diez años. De hecho, me lleva tanto a su recuerdo, que sueño algo relacionado con él hace un par de noches. Lo apunto en mitad de la madrugada:
Me gusta mucho el libro, así que lo subrayo y le hago fotos, este trocito me ha gustado especialmente:
El miércoles cae una granizada monumental seguida de una tormenta de verano bastante larga. Hago un vídeo de cómo cae el agua a porrón sobre la acera y se lo mando a mis padres, seguido de muchos emojis. Mi padre me manda un vídeo parecido pero desde su casa. La lluvia me pilla sentada en una terraza tomando una cerveza con una amiga, con la que iré después a un concierto (el de New Raemon en el Café Berlín). Toca muchos temazos y se me ponen los pelos de punta varias veces. Cuando acaba, nos hacemos amigas de unas chicas y unos chicos y volvemos a la terraza de antes (ya habíamos hecho migas con el camarero y en el sitio nos tratan genial) a seguir tomando algo. En algún momento decido irme y me pido una hamburguesa en el Oskar de Santo Domingo, para llevar. La devoro mientras veo un vídeo de BaityBait jugando al Roblox. Mientras mastico el último trozo de hamburguesa pienso que las recordaba mejores y me quedo dormida hasta las cinco de la mañana en el sofá, con las luces dadas y el ventilador dándome en la cara como en los videoclips de Paulina Rubio.
Aprovecho el jueves para sacar toda la ropa de verano que no me ha dado tiempo a lavar. Hacer estos cambios de armario a veces se sienten como comprar ropa nueva, porque después de tantos meses apenas recuerdo qué tenía. Pongo una lavadora que se seca a las tres horas del putísimo calor que hace. El viernes “estreno” vestido. Me acerco a la librería que voy siempre a buscar un regalo para un amigo (termino comprando El viento sopla donde quiere, de Jonás Trueba, tras leer la contraportada) y encargo otro libro. No sé cuándo voy a leerlo todo. Después salgo un rato por la tarde y cuando vuelvo a casa me tiro escribiendo y leyendo hasta las cuatro de la mañana, intentando componer sin éxito algo que recuerde a una décima.
Ayer sábado dormito un rato y me voy al cumple. A mi colega le gusta mucho el libro ❤
Sección música
Me he terminado haciendo Tidal, llevo como dos semanas. La usabilidad en comparación con Spotify es más complicada, o al menos eso me parece después de casi quince años usando Spoti. Me pierdo entre los menús y los botones. Pero sí noto algo más de calidad de sonido y reproducir las listas en aleatorio es verdaderamente algo aleatorio, Spotify siempre me ponía los mismos temas una y otra vez, aunque alguna de mis listas tiene más de 10 horas. Ambas apps cuestan lo mismo, pero Tidal paga más a los artistas y además tiene mejores recomendaciones hasta donde he podido ver. He pasado todas mis listas a Tidal a través de una web y de momento estoy contenta.
Esta semana he añadido varios temas.
El quito álbum de estudio de este señor me atropellado como un tranvía. Este disco es un regalo. Pipiripoporipoporpipopo (es mi interpretación de un saxo) porpirporpieperporpirpopooo.
Directo a la lista de pre-copas o cocinar. Mueve esos hombritos.
Eeeeven on a cloooudy daaay.
Me he tirado gran parte de la semana cantando este tema y haciendo así con los dedos como si tuviera un tecladito delante.
Sharon hija mía que te amo.
M a r a v i l l a, bro.
Sección audiovisual
Hoy la sección audiovisual es puramente tikitoki. Muchas cosas de coña y alguna interesante.
Antes tenía una lista (o colección) dentro de tiktok llamada “geniales” pero he creado otra llamada “greatgreat” que es ya la criba de la criba.
Espero que disfrutéis de mi criba cribada. Mis horas echadas en ese pozo habrán merecido la pena.
Sección poética
Es mi poema favorito de Mark Strand. No lo traduzco porque creo que no he leído aún una traducción que me guste de verdad. Todavía no sé si me pone triste o contenta.
In a field
I am the absence
of field.
This is
always the case.
Wherever I am
I am what is missing.
When I walk
I part the air
and always
the air moves in
to fill the spaces
where my body’s been.
We all have reasons
for moving.
I move
to keep things whole.